ALFOMBRA DE SILICONA PARA PIES DE CONEJO

“Es el lavapies que no sabía que necesitaba. Mi hija llega de gimnasia con los pies negros y ahora se los lava sola sin agacharse: pongo una gota de gel y listo, masaje + limpieza en segundos. Las ventosas se adhieren firme y no hay resbalones. Además, queda como alfombra antifatiga al ducharse, súper cómodo.”

“Al principio pensé que las cerdas serían duras, pero con agua tibia y un poco de jabón se ablandan y se sienten ricas; a la tercera ducha ya era puro placer. Exfolia bien los talones. El montaje de las ‘orejas’ requiere un poco de presión pero no es mayor problema".

“Tenía miedo a que se moviera o juntara agua, pero se pega como imán en cerámica lisa y drena rapidísimo, sin charcos. Es más grande de lo que imaginé (ocupa aprox. un tercio de la ducha), pero deja espacio para ducharse sin problema. Me encantó porque siento los pies limpios de verdad cada día.”

“Trabajo todo el día de pie y terminaba con los talones adoloridos. Con este lavapies siento un masaje cada vez que me ducho, es como un descanso instantáneo. El agua con jabón corre por las cerdas y la espuma hace todo más fácil. Mis pies quedan suaves y relajados.”

“Lo compré pensando en mi papá, que tiene movilidad reducida, y le ha servido muchísimo. Puede lavarse los pies sin agacharse ni pedir ayuda. Me sorprendió la calidad del material: firme, grueso y no se desgasta con el uso diario. De verdad práctico y seguro.”

“Mi hijo adolescente lo usa después de entrenar fútbol y dice que siente alivio en la planta de los pies. Yo lo probé y es cierto: masajea mientras limpia. Las ventosas no se despegan ni con la presión del agua fuerte. 100% recomendable para familias con niños deportistas.”

“Lo mejor es que se seca rápido, no queda con mal olor ni humedad. Lo uso en la mañana y en la noche, y todavía se ve como nuevo después de varias semanas. Además de limpiar, da esa sensación rica de spa casero que no esperaba en un producto tan simple.”